Mentiras climáticas y verificación de hechos

By Fresopolis

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CO² en el suelo

-¿cómo funciona y por qué es importante?

¿Qué es el CO₂ y cómo llega al suelo?

El CO₂ (dióxido de carbono) es un gas presente en el aire. Las plantas absorben CO₂ de la atmósfera y, con la ayuda de la luz solar y el agua, lo utilizan para formar sus hojas, tallos y raíces. Parte de este carbono llega al suelo a través de las raíces y de los restos de plantas muertas.

¿Cómo almacena el suelo el carbono?

Fotosíntesis: Las plantas absorben CO₂ y lo convierten en materia orgánica.
Raíces y restos vegetales: Cuando las plantas crecen, mueren o desprenden raíces, el carbono pasa al suelo.
Organismos del suelo: Microbios, hongos y lombrices descomponen estos restos. Parte del carbono se libera nuevamente como CO₂, y otra parte queda almacenada en el suelo como humus.
Humus y materia orgánica: La fracción estable del carbono puede permanecer en el suelo durante años o siglos; a esto se le llama almacenamiento de carbono o secuestro de carbono.

CO2 Speichersystem

¿Cuánto carbono hay en el suelo?

A nivel mundial, los suelos almacenan aproximadamente 1.500 mil millones de toneladas de carbono, ¡más que la atmósfera y todas las plantas juntas!
Así, el suelo es el segundo mayor almacén de carbono del planeta, después de los océanos.

¿Por qué es importante para el clima?

El CO₂ es un gas de efecto invernadero: Cuanto más CO₂ hay en el aire, más cálido se vuelve el planeta.
Suelos como “sumidero de CO₂”: Cuando los suelos almacenan mucho carbono, queda menos CO₂ en la atmósfera, lo que ayuda a frenar el cambio climático.
Pero: Si los suelos se alteran (por ejemplo, mediante el arado, la deforestación o el drenaje de humedales), el carbono almacenado se libera nuevamente como CO₂ y pasa a la atmósfera, acelerando el cambio climático.

¿Cómo podemos almacenar más CO₂ en el suelo?

Buenas prácticas:
Arar poco o nada: Así el carbono permanece en el suelo.
Mantener el suelo siempre cubierto: Con plantas, mantillo o cultivos de cobertura—protege contra la erosión y mantiene el suelo vivo.
Cultivar diversas especies vegetales: Diferentes plantas favorecen la vida del suelo y el almacenamiento de carbono.
Usar compost y abonos orgánicos: Aportan nuevo carbono al suelo y fortalecen los organismos del suelo.
Plantar árboles y arbustos: Almacenan mucho carbono y protegen el suelo.

Malas prácticas (¡evitar!):
Arar o remover la tierra con frecuencia
Monocultivos sin rotación de cultivos
Suelos desnudos y sin cobertura
Uso excesivo de fertilizantes y pesticidas sintéticos

Feld mit Traktor

¿Qué pasa si no tenemos cuidado?

Los suelos pierden carbono: Por la agricultura intensiva, la deforestación y el mal manejo, los suelos del mundo ya han perdido entre el 50 y el 70% de su carbono original.
El cambio climático se acelera: Esta pérdida de carbono ha causado aproximadamente una cuarta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero provocadas por el ser humano.
Los suelos se vuelven infértiles: Sin humus, las plantas crecen peor y el suelo es más vulnerable a la erosión y las inundaciones.

Resumen

Los suelos son grandes almacenes de CO₂ y ayudan a proteger el clima.
Con un buen manejo, podemos almacenar más CO₂ en el suelo.
Si tratamos mal los suelos, se pierde mucho CO₂ y el cambio climático empeora.
¡Todos podemos ayudar: en el jardín, en el campo o con un consumo consciente!

Recuerda:

¡Los suelos sanos son clave en la lucha contra el cambio climático: almacenan carbono, protegen el clima y garantizan campos fértiles!

 

El autor: Francesco del Orbe

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