De la inspiración a la implementación
A través de nuestras investigaciones sobre agricultura regenerativa, hemos encontrado algo extraordinario: la agroforestería en Grand Farm, un modelo para una agricultura sostenible.
¿Por qué agroforestería? Una cuestión de viabilidad futura
Cada año, se pierden en promedio 5,6 toneladas de suelo fértil por hectárea en los campos de cultivo debido a la erosión causada por el agua y el viento. La capa superior del suelo, que es lo que hace que nuestra tierra sea tan valiosa, es arrastrada por lluvias intensas y el viento. Esto es un verdadero problema, ya que sin esta capa, la fertilidad natural del suelo disminuye drásticamente. Los expertos advierten: muchas tierras cultivables podrían dejar de ser productivas en pocas décadas y no producirían suficientes alimentos.
La solución: devolver árboles y arbustos a los campos
Grand Farm apuesta por una solución tanto tradicional como innovadora: los sistemas agroforestales. Se plantan setos, árboles y arbustos de forma estratégica dentro y alrededor de los campos. Este principio proviene de nuestros antepasados, que rodeaban sus campos con setos para proteger el suelo de la erosión y fomentar la biodiversidad.
¿Cómo se implementa la agroforestería en la práctica en Grand Farm?
Plantación de setos como cortavientos naturales: Se establecen setos de especies autóctonas como franjas cortavientos. Reducen significativamente la velocidad del viento y, por tanto, la erosión del suelo.
Fomento de la biodiversidad: Los setos ofrecen refugio y alimento a numerosos animales, contribuyendo al equilibrio natural entre plagas y organismos beneficiosos.
Gestión del agua: Los setos disminuyen la evaporación en las zonas adyacentes. Además, aumenta la formación de rocío alrededor de los setos, aportando más agua a la zona.
Beneficio económico: Los setos están formados principalmente por especies autóctonas que, en el futuro, pueden aprovecharse económicamente, por ejemplo, mediante la recolección selectiva de madera.
Investigación y monitoreo: Grand Farm colabora con diferentes socios para investigar a largo plazo los efectos de los sistemas agroforestales en la humedad del suelo, la biodiversidad y el microclima.
¿Por qué es tan importante el cambio hacia la agroforestería?
La agricultura convencional ha llegado a sus límites. Las consecuencias: erosión del suelo, disminución de la fertilidad, escasez de agua y reducción de la biodiversidad. Los sistemas agroforestales ofrecen múltiples ventajas:
Protección del suelo y contra la erosión: Las raíces de árboles y arbustos estabilizan el suelo.
Aumento de la fertilidad del suelo: La caída de hojas y las exudaciones de las raíces enriquecen el suelo con nutrientes.
Retención y calidad del agua: Los árboles retienen el agua en el suelo y mejoran su calidad.
Protección climática: Los sistemas agroforestales almacenan grandes cantidades de CO₂ en la madera y el suelo.
Biodiversidad: Aumenta significativamente la variedad de plantas y animales.
Ventajas económicas: Además de los rendimientos tradicionales, los sistemas agroforestales ofrecen fuentes de ingresos adicionales.
Adaptación al cambio climático: Estos sistemas son más resistentes a fenómenos meteorológicos extremos.
Fresopolis se inspira y ya implementa con éxito la agroforestería
Fresopolis se inspira y ya implementa con éxito la agroforestería
El 50% de nuestra tierra ya estaba muerta y era inutilizable para la agricultura.
En Fresopolis estamos entusiasmados con el enfoque y el compromiso de Grand Farm y nos dejamos inspirar por ellos. Desde 2024, implementamos sistemas agroforestales en nuestras tierras: el año pasado plantamos un total de 2.500 árboles, dando un paso importante hacia una agricultura sostenible.
Así, las zonas antes inutilizables vuelven a ser una parte importante del ecosistema.
Nuestra motivación:
Nos alegra ver que en terrenos antes sin uso vuelve a surgir vida. Los árboles capturan grandes cantidades de CO₂ y contribuyen activamente a la protección del clima. Al mismo tiempo, fomentamos la biodiversidad y creamos nuevos hábitats para insectos, aves y pequeños mamíferos.
Perspectiva:
A partir del próximo año, comenzaremos en estos terrenos la primera prueba de cultivo de forraje para animales. Así probaremos cómo se pueden combinar los sistemas agroforestales con la producción de forraje de alta calidad, una forma más de trabajar de manera sostenible y rentable al mismo tiempo.
Conclusión: La agroforestería es la agricultura del futuro
El enfoque de Grand Farm demuestra cómo la agricultura puede volver a ser sostenible y preparada para el futuro. En Fresopolis también estamos convencidos: la agroforestería no es un lujo, sino una necesidad, para un futuro habitable sobre suelos fértiles.
El autor: Francesco del Orbe